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La Ilustración Liberal

Europa: resumen del Ramadán 2018

El original de este artículo (en inglés) se publicó el 17 de junio en la web de Gatestone Institute.

Los musulmanes de toda Europa están celebrando el fin de Ramadán, el mes sagrado del islam, que en 2018 se ha celebrado entre el 17 de mayo y el 15 de junio, según el calendario lunar islámico.

El Ramadán, objeto de gran debate público en Europa este año, recibió una considerable cobertura mediática, lo que refleja la creciente influencia del islam.

Los líderes musulmanes querían aprovechar la atención de los medios para mostrar el Ramadán –periodo en que los musulmanes se abstienen de comer y beber entre la salida y la puesta del sol para conmemorar, según la tradición islámica, la revelación del Corán a Mahoma– como la naturaleza pacífica del islam en Europa.

Los multiculturalistas europeos, que suelen aplicar estrictamente el laicismo cuando se trata del cristianismo, hicieron grandes esfuerzos por redactar directrices, dar instrucciones y crear privilegios especiales para asegurar que los no musulmanes no ofendieran a los musulmanes durante la festividad.

Pero, rompiendo con el pasado, un creciente número de políticos europeos hicieron declaraciones públicas contra el Ramadán, en especial sobre los efectos adversos del ayuno prolongado en niños en edad escolar. El clamor popular, reflejado en la emergencia de partidos políticamente incorrectos en Europa, parece dar cuenta de un creciente hartazgo ante el multiculturalismo desatado y la constante erosión de los valores occidentales.

Lo que sigue es un breve resumen de algunos incidentes relacionados con el Ramadán en varios países europeos:

En Austria, el secretario general del Partido Popular, Karl Nehammer, pidió la prohibición del ayuno en menores en edad escolar. Dijo que había recibido “innumerables” informes de profesores sobre el estado de salud de los niños durante el Ramadán. “Si los rituales religiosos, al margen de cuál sea la confesión, ponen en peligro la salud de los niños, es que esto ha ido claramente demasiado lejos”, dijo Nehammer. “Si se pone la religión por encima de la salud de los niños, hay que pararlo”.

La Comunidad Religiosa Islámica de Austria (Islamischen Glaubensgemeinschaft in Österreich, IGGiÖ) acusó a Nehammer de intentar “prohibir” el Ramadán. La portavoz de IGGiÖ, Carla Amina Baghayati, tachó las declaraciones de Nehammer como “ofensivas y humillantes” y, retorciendo la lógica, afirmó que Nehammer estaba empujando a los niños hacia el fundamentalismo islámico:

Esto conduce a una alineación peligrosa en la sociedad. Los niños y los adolescentes sienten especialmente esta medida política hostil. Corren el riesgo de apartarse deliberadamente de la sociedad local y volverse aún más susceptibles a las ideas radicales.

Peter Kusstatscher, director de HTL Villach, el colegio más grande de Austria, dijo que el propio Ramadán estaba radicalizando a algunos alumnos musulmanes. “Ahora ves cómo se radicalizan con el tema del islam y viven radicalmente según sus creencias”. Explicó un incidente en el que un estudiante musulmán insultó a una compañera porque iba maquillada durante el Ramadán. “Por supuesto, intervinimos, porque no se trataba de mostrar tolerancia hacia una comunidad religiosa”, declaró.

En Bélgica, la iglesia católica de San Juan de Bruselas acogió una cena de iftar, que se celebra tras la puesta de sol durante el mes de Ramadán. “Lo que estamos haciendo esta noche es un extraordinario símbolo del poder que emana de iniciativas comunes como esta”, dijo el sacerdote católico Jacques Hanon. “Queremos mostrar que la fortaleza reside en responder juntos a las dificultades, los miedos, la violencia, el odio y la discriminación”.

El presidente de las comunidades islámicas en Bruselas, Lahcen Hamuche, manifestó:

Hemos elegido este momento del sagrado mes de Ramadán, el mes de compartir y perdonar, para celebrar y compartir con las iglesias de todas las confesiones y culturas, para demostrar que los musulmanes no somos todos terroristas y que somos capaces de tener una buena convivencia entre otras religiones y filosofías.

Hamuche no dijo si las mezquitas belgas actuarían con reciprocidad celebrando las festividades cristianas.

En Chipre, el Departamento de Obras Públicas anunció que había dado prioridad a la renovación, financiada con dinero público, de una mezquita en Paphos para que se pudiera usar para el Ramadán:

A pesar de los retrasos en el proyecto, el Departamento de Obras Públicas, respecto a la petición de la comunidad musulmana de asegurar un lugar cómodo y seguro para que puedan ejercer sus derechos religiosos, y puesto que no ha sido posible encontrar otro lugar, ha logrado que el contratista siga adelante con los trabajos de construcción en la mezquita para que pueda estar terminada y utilizarse de forma segura durante el Ramadán.

En Dinamarca, la ministra de Integración, Inger Støjberg, pidió a los musulmanes practicantes que se tomaran unas vacaciones durante el Ramadán para evitar un impacto negativo en el resto de la sociedad. En un artículo de opinión publicado por el periódico danés BT, escribió:

Debemos abordar los problemas que el Ramadán nos plantea en el presente. Es innegable que las exigencias de una sociedad moderna y eficiente como la de Dinamarca son muy distintas de las de La Meca en tiempos de Mahoma. (…)

Puede ser muy peligroso para todos que el conductor de autobús no coma ni beba durante todo el día, y por supuesto no se rinde al mismo nivel en la fábrica o el hospital si no comes y bebes en las horas diurnas durante todo un mes.

Respeto que los musulmanes quieran practicar su religión y sus tradiciones, pero creo que la religión es un asunto privado, y es necesario que nos aseguremos de que no se convierta en un problema social. No quiero privar a los musulmanes daneses de la oportunidad de cultivar su religión y sus fiestas religiosas, pero les animaría a irse de vacaciones durante el mes de Ramadán, para que no tenga efectos adversos sobre el resto de la sociedad danesa.

En Francia, el Gobierno, que había prometido reducir la influencia extranjera en la práctica del islam en el país, aprobó visados para que trescientos imanes de Argelia y Marruecos dirigieran servicios religiosos en mezquitas francesas durante el Ramadán. La decisión generó una reacción negativa en todo el espectro político. “Es inaceptable pedir a Argelia y Marruecos que nos manden imanes durante el mes de Ramadán”, declaró el ex primer ministro socialista Manuel Valls, que ha prometido “cortar todos los puentes” entre los musulmanes de Francia y “terceros países”.

La líder del Frente Nacional, Marine Le Pen, dijo: “Es inaceptable que el ministro del Interior organice la llegada de trescientos imanes extranjeros a nuestro país durante el Ramadán; es una violación del principio secular (laïcité)”. Su aliado en las elecciones presidenciales de 2017, Nicolas Dupont-Aignan, exigió que los imanes extranjeros hicieran un “juramento de lealtad a Francia y a la República”.

En Chambourcy, los gerentes de un Carrefour accedieron a las exigencias musulmanas de retirar dátiles israelíes del departamento de Ramadán del establecimiento. Hubo clientes se quejaron de que la presencia de productos israelíes era “una afrenta a los clientes musulmanes”.

Europe 1 informó de que Ramadán suponía una gran “bonanza comercial” para los vendedores franceses. Mimun Ennebati, líder de una asociación francesa musulmana, manifestó: “A priori, los grandes distribuidores no quieren ofender a cierta clientela” durante el Ramadán. Calculó que los musulmanes practicantes aumentan su gasto un 30% durante el mes sagrado.

En Mantes-la-Jolie, un suburbio de París, un hombre de 42 años fue acusado de asesinato tras zarandear a su hija de cinco meses hasta matarla. El hombre, que confesó el crimen, dijo: “Estaba cumpliendo con el Ramadán, sin comer, y tenía los nervios destrozados”.

En Alemania, Martin Sichert, abogado del partido antimigración Alternativa por Alemania (AfD), pidió que se impidiera a doctores, enfermeros, pilotos y conductores de autobuses y trenes musulmanes trabajar durante el Ramadán si ayunaban. “¿A qué paciente operaría un cirujano que no ha tomado nada para beber durante doce horas?”, preguntó Sichert, miembro de la comisión parlamentaria para asuntos laborales y sociales. “¿Porqué la gente habría de ser transportada por individuos que quizá sufran problemas de concentración y deshidratación porque están en ayuno durante horas?”.

La ministra de Familia, Franziska Giffey, advirtió de que las “interpretaciones estrictas” sobre el ayuno estaban teniendo un impacto negativo en los estudiantes musulmanes: “Los niños necesitan beber y comer con regularidad, de lo contrario no pueden prestar atención en clase o hacer ejercicios conjuntos en educación física”. También dijo que había una creciente presión de los compañeros para observar el ayuno durante el Ramadán. “No debería haber discriminación, no importa si alguien ayuna o no”.

Heinz-Peter Meidinger, presidente del Sindicato de Profesores Alemanes (Deutsche Lehrerverband), expresó su preocupación por que “muchos estudiantes se toman en serio el ayuno”. Se quejó de que los padres musulmanes estaban presionando cada vez más a los profesores para que pusieran los exámenes después del Ramadán. Este retraso, dijo, estaba teniendo un impacto negativo en los estudiantes no musulmanes.

En Landshut (Baviera), políticos y sacerdotes cristianos abandonaron un festival intercultural del Ramadán después de que se cantaran versos coránicos en árabe, en vez de en alemán, como se había prometido al principio. “Cantar el Corán en árabe es incompatible con los objetivos de la integración exitosa”, comentó Thomas Haslinger, jefe local de la Unión Social Cristiana.

La emisora pública Deutschlandfunk afirmó que “el Ramadán es una vieja costumbre alemana que lleva aquí desde antes que el Oktoberfest”. El escritor Eren Güvercin añadió: “Hace mucho que la práctica religiosa islámica encontró su hogar en Alemania. Y nosotros, los musulmanes alemanes, estamos deseando que llegue el Ramadán a nuestra Alemania. Nadie puede negárnoslo”.

En Grecia, cientos de solicitantes de asilo árabes y kurdos se pelearon tras una discusión sobre el ayuno de Ramadán en el campo de refugiados de Moria, en la isla de Lesbos. Mohamed Jalil, un migrante kurdo de 19 años procedente de Siria, explicó: “La pelea comenzó cuando unos jóvenes árabes empezaron a pelearse con los kurdos por el ayuno (…) Unos árabes de Siria, Irak, el Yemen y Argelia vinieron y dijeron que los kurdos de la Rojava [del Kurdistán sirio] son infieles y no tienen permitido ayunar. Después los hombres empezaron a pelearse. Los refugiados árabes se fueron y volvieron con refuerzos. Se produjo una pelea sangrienta”.

En Islandia, donde en esa época del año el sol sale a las 3 de la mañana y se pone a medianoche, los musulmanes cumplieron el Ramadán siguiendo la hora de La Meca, donde el sol se pone sobre las 7 de la tarde, para evitar ayunar durante 20 horas o más. Ahmad Sedeq, imán del centro cultural islámico de Islandia y de origen egipcio, dijo que era más fácil ayunar en un clima frío: “Lo he hecho durante años, y me parece más difícil en mi país, donde hay entre 40 y 45 grados”.

En Italia, los alumnos del instituto Albert Einstein de Turín retrasaron una cena hasta después de las diez para que Reda Herradi, una compañera italo-marroquí de 17 años, pudiese asistir. Los periódicos locales elogiaron “el lado más bonito de la integración, cuando los jóvenes de origen italiano y otros de origen extranjero, católicos y musulmanes, pasan los días en contacto unos con otros”. Luisa Mondo, madre de uno de los alumnos, dijo: “Lo que es llamativo es la naturalidad de todo ello. En un vecindario heterogéneo y multiétnico, un grupo de adolescentes nos ha enseñado lo que es la verdadera integración”. En la sección de comentarios, los lectores señalaron que este no era un ejemplo de “verdadera integración”, sino de “integración inversa”, donde los anfitriones italianos se integraban en la cultura de la extranjera.

También en Turín, 35.000 musulmanes se congregaron en el parque Dora para celebrar el Eid al-Fitr, el fin del Ramadán: “Récord de asistencia: este año tuvimos que ampliar la zona de rezos por los laterales del pabellón para poder acoger a los fieles. Muchos de ellos eran jóvenes y mujeres”, dijo Ismail Sikder, responsable de la mezquita Dar as Salam y organizador del acto. Tras una serie de discursos de felicitación de los sacerdotes y políticos cristianos locales, Monica Cerutti, consejera de la región de Piamonte, anunció un programa pagado con dinero público para proveer circuncisiones gratuitas a los niños musulmanes. “Este es un ejemplo concreto, pero hay muchos otros puntos de encuentro entre la región de Piamonte y la comunidad musulmana”, dijo Cerutti. Las circuncisiones gratuitas se están ofreciendo tras la muerte de un niño de Ghana que murió desangrado tras someterse a una circuncisión doméstica.

También en Turín, un marroquí de 40 años fue arrestado después de dar patadas y puñetazos a su mujer por no respetar el Ramadán. La mujer denunció a su marido “tras una noche de terror en la que también volcó un cubo de agua sobre su colchón para mantenerla despierta”, informó la Policía.

En Cascina (Pisa), la alcaldesa Susanna Ceccardi aprobó la solicitud de la comunidad senegalesa de celebrar el Eid al Fitr en un gimnasio municipal, pero sólo después de que la comunidad “condenara firmemente” todos los actos de violencia producidos por el fundamentalismo islámico. “Según Oriana Fallaci, cuyo nombre daremos a una plaza el próximo lunes en Casina, ‘la libertad es un deber antes que un derecho’”, dijo Ceccardi. “Este Gobierno municipal exige una postura clara sobre el problema del fundamentalismo islámico, sin confusiones”. Ceccardi volvió a expresar su oposición a la construcción de mezquitas en Italia:

Nuestra postura no ha cambiado: estamos absolutamente en contra de la construcción de mezquitas en nuestro país, porque a fecha de hoy no hay garantías de que el ejercicio de la religión islámica no cree problemas de seguridad pública y no esconda actividades terroristas.

En Cagliari, la capital de Cerdeña, un colegio ofreció un menú especial consistente en platos tradicionales árabes, que incluía cuscús, humus y chorba, para celebrar el fin del Ramadán. Un portavoz del Movimiento Social Sardo, contrario a la inmigración, dijo:

Esperamos que los estudiantes puedan elegir el menú normal. Sería absurdo someter a todos a una dieta diseñada específicamente para cumplir las necesidades religiosas de una minoría.

En Trento, el imán Abuljeir Breigheche se dirigió a cientos de musulmanes que se reunieron para celebrar el Eid al-Fitr:

El mensaje que queremos enviar hoy, al final de esta fiesta del Ramadán, es que esta comunidad de fe islámica es una comunidad sólida y numerosa que quiere mantener sus propias tradiciones religiosas y culturales, para hacer posible que la siguiente generación crezca de forma equilibrada.

En Palermo, el alcalde Leoluca Orlando declaró:

El fin del Ramadán es un momento especialmente significativo para todos los musulmanes, un momento para compartir y reflexionar que vincula a esta comunidad de manera muy fuerte a Palermo, y su tradición milenaria inter y multicultural.

Más de 5.000 musulmanes se congregaron para celebrar el Eid al-Fitr en Florencia, 3.000 en Piacenza, y muchos más en Bari, Bolonia, Brescia, Cosenza, Génova, Lodi, Monfalcone, Nápoles, Roma, Trento, Trieste, Vasto y Venecia, entre otras ciudades.

En los Países Bajos, Tofik Dibi, exdiputado holandés-marroquí, tuiteó la imagen de un francotirador con las palabras: “Este soy yo cuando tomo una copa en una terraza durante el Ramadán”. Después dijo que estaba molesto por las reacciones airadas a su tuit: “Mi bandeja de entrada se ha convertido en una cloaca porque las reinas del drama están intentando distorsionar mi broma sobre el Ramadán”.

En Róterdam, el alcalde Ahmed Abutaleb defendió la decisión de permitir a una organización llamada Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente (Pegida) protestar contra el Ramadán delante de una mezquita de la ciudad portuaria. “Cada mensaje, no importa lo tóxico que sea, tiene derecho a ser expresado”, manifestó.

Pegida quería celebrar barbacoas de cerdo delante de varias mezquitas de todo el país, pero las manifestaciones se prohibieron en Utrecht, La Haya, Arnhem y Gouda. Abutaleb había dado su aprobación a la protesta, pero un autobús que llevaba a unos veinte seguidores de Pegida dio la vuelta después de que cientos de personas se congregasen para celebrar una contramanifestación.

El ministro turco para Asuntos de la Unión Europea, Ömer Çelik, criticó a Abutaleb:

El jueves, cuando se interrumpa el ayuno del Ramadán, miembros de esta organización fascista celebrarán una barbacoa delante de la mezquita Laleli de Róterdam y asarán cerdos en espetones.

Conceder permiso para dicha actividad inmoral revela una deficiencia moral. Otros ayuntamientos neerlandeses no han permitido a Pegida asar cerdos delante de las mezquitas en el momento de la interrupción del ayuno. Sin embargo, Ahmed Abutaleb, alcalde de Róterdam, que es de origen marroquí, piensa que esa actividad de Pegida no va contra la ley. ¡Qué tragedia!

Abutaleb repuso:

El ministro turco de Asuntos Exteriores intentó darme una lección a cuenta de mi identidad islámica. Que un país extranjero, muy distante, trate de dar lecciones al alcalde de Róterdam sobre la ley holandesa y cómo debería aplicarla es ir demasiado lejos.

En La Haya, se cree que jóvenes musulmanes están detrás de varios ataques a un templo hindú del distrito de Schilderswijk. El edificio ha sufrido frecuentes ataques vandálicos durante el Ramadán: “Nos están amedrentando grupos de jóvenes; no sólo durante el Ramadán, también durante nuestras propias fiestas religiosas”, declaró Sidharth Ramdhani, portavoz del templo.

Mientras, Coca-Cola Países Bajos compartió un nuevo anuncio en su página de Facebook para luchar contra los prejuicios durante Ramadán. El vídeo mostraba a una joven musulmana resistiendo la tentación en las últimas horas del ayuno antes de la puesta de sol, cuando un trajeado transeúnte no musulmán le ofrece una cocacola. La musulmana declina el ofrecimiento, porque aún no se ha puesto el sol; La mujer espera a que el sol se ponga para beber juntos de la emblemática botella. El vídeo termina con el eslogan: “Lo que nos une es más grande que lo que nos separa”.

En España, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, eliminó o sustituyó numerosas referencias y costumbres católicas, y en 2017 renombró la Navidad como una neopagana Feria de las Culturas, pero ocho distritos de la ciudad acogieron más de veinte actividades culturales para celebrar el Ramadán. El programa, denominado Noches de Ramadán y costeado por los contribuyentes, tenía el objetivo de “acercar más la fiesta religiosa del Ramadán a los ciudadanos de Madrid”.

En Suiza, el Departamento de Infancia y Juventud envió una carta a los directores de todas las escuelas de secundaria de Ginebra advirtiéndoles de las efectos físicos del ayuno sobre los estudiantes, con recomendaciones para tratar problemas como la hipoglucemia o la deshidratación. Con el interés de “promover la integración de todos”, la misiva urgía a los profesores a mostrar tolerancia hacia los alumnos musulmanes reduciendo los esfuerzos físicos que se les exigen y reprogramando excursiones o viajes de estudios para después del Ramadán.

La carta provocó una contundente respuesta de los políticos locales, que acusaron al Estado de “readaptar el currículum y las actividades escolares al calendario islámico”. Jean Romain, presidente del Gran Consejo de Ginebra, dijo que la carta era “penosa”, porque la ley exige claramente que las escuelas se ciñan al laicismo: “La dirección del Departamento no está haciendo su trabajo (…) Las religiones no pueden legislar ni regular el dominio público. Hemos adoptado una ley sobre laicismo: aplíquenla”.

En St. Gallen, los colegios reportaron un aumento del absentismo escolar durante el Ramadán, así como de peticiones de tratamiento especial para los estudiantes musulmanes. “En nuestra opinión, la observancia del Ramadán no es obligatoria para los niños y adolescentes”, declaró el director Hannes Schwarz, que añadió que ya hay alumnos de primaria que ayunan. Un maestro de primaria de Zúrich que pidió mantener el anonimato dijo: “Tengo alumnos de segundo que están ayunando. Hablan de ello, les parece genial y se animan a hacerlo unos a otros”. La experta en el islam Saïda Keller-Mesahli afirmó que estaba preocupada por la adherencia estricta de los niños musulmanes al ayuno: “En Europa, el Ramadán se interpreta de forma mucho más estricta que en los países musulmanes”.

En Reino Unido, Paigham Mustafa, escritor escocés-musulmán, fue amenazado de muerte después de escribir un mensaje en Facebook diciendo que el ayuno entre el amanecer y el anochecer durante el mes de Ramadán no está decretado en el Corán. En una serie de comentarios amenazantes a su mensaje, un sujeto escribió: “Cállate o te cortaremos la cabeza (…) Cállate o te decapitaremos (…) Cállate, perro kafir [no creyente], te decapitaremos (…) te mataremos, kafir”. En un mensaje privado, otro crítico puso: “El Corán dice que matemos a la gente como tú. Mereces que te maten. Te mataremos”. Mustafá respondió: “Creo que es importante recalcar que no estoy en contra del islam. Simplemente quiero que la gente sea consciente de que esos rituales no están en el Corán. No digo que esté mal ayunar, sino que el ayuno no está decretado”. A Mustafá y a su familia se les ofreció protección policial.

En Londres, la catedral de Southwark celebró una cena de iftar –celebrada durante el Ramadán tras la puesta del sol– como parte del programa de actos para celebrar el aniversario del atentado en el Puente de Londres. El arzobispo de Southwark, Christopher Chessun, habló de la “ciudad de la paz” y la “comunidad de la paz” antes de invitar a los congregados a darse la señal de la paz unos a otros. Un activista local, Amir Eden, declaró: “Este acto es otra oportunidad para unir a las personas de diferentes religiones, o de ninguna religión en particular, para celebrar nuestro amor y compasión por los demás”.

En Dalston, al este de Londres, los consejeros religiosos de la mezquita Masjid Ramadan anunciaron que el bitcoin, la criptomoneda, es halal (permisible según la ley islámica) para las donaciones en Ramadán si “la transacción se hace de manera legal”. La mezquita dijo que aceptaría donaciones en dos criptomonedas distintas: bitcoin y ethereum. Zayd al Jair, consejero religioso de la Masjid Ramadan, dijo:

Cualquier moneda o divisa es halal, permisible, o haram, no permisible. Lo que hay que tener en cuenta es el valor que representa. Si la transacción monetaria se hace de manera legal, entonces es halal. No siempre conocemos el origen de las donaciones en efectivo, pero las consideramos de buena fe.

En Kent, la Asociación Internacional del Glaucoma (IGA) advirtió a los musulmanes con glaucoma de que no debían dejar de echarse las gotas durante el Ramadán, porque podría causarles una pérdida de visión irreversible. Algunos musulmanes dejaron de echarse las gotas durante el Ramadán, creyendo que usarlas interrumpiría su ayuno. Subhash Subhash, director de Desarrollo de la IGA, advirtió a los pacientes de que tuviesen cuidado al echarse las gotas para que el fluido no se saliera del ojo y no cayera a la garganta, con lo que romperían el ayuno.

En Keighley, los responsables del cuerpo de bomberos pidieron a los musulmanes observantes del Ramadán que tuviesen cuidado ante el riesgo de incendios domésticos. Chris Kirby, jefe de brigada del área de West Yorkshire, declaró: “El Ramadán es un momento de gran importancia para los musulmanes, pero también un momento en el que todo el mundo debería estar especialmente alerta cuando cocina, sobre todo cuando se está cansado al final de todo un día de ayuno”.

Volviendo a Londres, Metro, el periódico con más circulación en el Reino Unido, publicó instrucciones para los musulmanes que no lograran mantener el ayuno. Un artículo titulado “¿Cuánto es la fidia y la kafara para el Ramadán de 2018?” decía:

No importa cuánto te esfuerces por ayunar: a veces pasan cosas. En vez de sentirte fatal por ello, hay maneras de mostrar tu dedicación en vez de simplemente ayunar. Son la fidia y la kafara.

La fidia es una donación para la caridad si no puedes ayunar durante el Ramadán (…) Se supone que debes pagarla antes de fallar en el ayuno, o antes del Ramadán si sabes que no vas a poder participar en todo el mes. Se paga con el mud, es decir, ofreciendo una comida a alguien que no se la puede permitir.

Dos muds equivalen a un pago de la fidia. Este año, la Human Relief Foundation lo calculó en 4 libras, o 120 para todo el Ramadán. Muslim Aid lo cifró en 5 libras, o 150 para todo el mes. Islam Freedom recomienda el pago de 3 libras al día.

La kafara es una idea similar pero se paga si te saltas deliberadamente el ayuno. Como se puede comprender, la kafara es mucho más cara. Si rompes el ayuno deliberadamente, debes pagar lo suficiente para alimentar a 60 personas (60 muds) o ayunar 60 días más por cada uno que falles en Ramadán, como penitencia. Eso son 240 libras según la HRF para la kafara, así que sin duda es mejor evitar saltárselo. Si optas por hacer una donación a una organización benéfica distinta, son 300 libras para Muslim Aid, o 180 para Islam Freedom.