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La Ilustración Liberal

Cinismo francés

Un tal grado de cinismo se convierte en arte, o al menos en algo que algunos calificarían de política. Apenas han perdido el petróleo iraquí, por motivos obvios, que intentan recuperar sus intereses con el petróleo iraní; y para complacer a los ayatolas de Teherán lanzan una oleada represiva contra los "combatientes del pueblo iraní", organización de izquierdas y de oposición. Y todo el mundo, en Francia como en Teherán, aplaude como si se tratara de una valiente operación antiterrorista, cuando sólo se trata de obtener petróleo. Desde luego, esta organización, que la prensa gala califica, sin inmutarse, de marxista-islamista, no es un movimiento de ángeles de la guarda. Un nutrido núcleo de sus "combatientes" estaba refugiado y tolerado en Francia, desde 1981, y evitaron cometer el menor delito en este país, pero representan otra vertiente del totalitarismo, y, hablando claro, la vertiente iraquí, ya que es una organización dirigida y subvencionada desde Bagdad. Mientras las relaciones entre París y Bagdad fueron excelentes, los mercenarios iraníes gozaron de buena salud en Francia, ahora que han perdido estrepitosamente la "batalla de Irak", las autoridades francesas los tiran a la basura, y encarcelan a sus dirigentes, para complacer a Teherán. En este sentido, cabe preguntase si la colaboración franco-española contra ETA no peligra, teniendo en cuenta los desacuerdos entre ambos gobiernos sobre muchas cuestiones. Son capaces de todo.

No sólo son cínicos en este caso, como cuando se gargarizan con la palabra Paz y no paran de guerrear en África para sus intereses, desde hace 50 años, con o sin el aval de la ONU; o como cuando Chirac insulta a los patronsvoyous, siendo el estado el más bandido de los patronos, con casos como el del Crédit Lyonnais, y aún peor, el de ELF. Por estos y muchos otros motivos se les puede calificar de cínicos, pero además son cretinos. Porque sólo un cretinismo profundo, cultural, puede justificar la fama de un mequetrefe como José Bové. Desde Edgar Morin a Bernard Pívot, desde Le Monde a Le Figaro y pasando por casi toda la clase política y los medios, unánimes, todos ensalzan la figura de ese mediocre estafador profesional. Habiendo cometido delitos, destruido restaurantes Mc Donalds, arrasado cultivos experimentales de productos genéticamente modificados, había sido juzgado, con todas las de la ley, ante tribunales, y condenado a prisión. Como no se presentó a la convocatoria de la Justicia, los gendarmes fueron a buscarle y Francia se indigna o llora. Como es de izquierdas –dicen– y antimundialista, estaría más allá de las leyes que sólo conciernen a los ladrones de bicicleta sin partido. Hasta el Ministro de Justicia se atreve a prometer que Bové se beneficiará de la gracia presidencial, con motivo de la Fiesta Nacional del 14 de Julio. Y Le Monde, como no podía ser menos, denuncia airadamente esos ataques contra la "acción sindical" y la izquierda de este gobierno derechista. Cuando algo dice Bové, al margen de sus berrinches anticapitalistas, es profundamente reaccionario: defiende una agricultura cara para ricos, ultra protegida y subvencionada. A fin de cuentas una política muy parecida la que defiende el gobierno. Sin ideas, ni líderes, la izquierda francesa intenta entusiasmarse con mediocres peleles reaccionarios. Porque en su conjunto lo es. ¿Y la reforma de las pensiones? Pasará, es mala y por lo tanto, pasará.

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comentarios
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Tout le monde n'est pas d'accord
Victor

Tout le monde n'est pas d'accord en France avec ce que vous dites. La plus part des fois, je suis d'accord avec vos articles mais sachez qu'il y a plein de français de droite et de gauche qui sont fièrs d'avoir un président comme Chirac qui dit "non" au Président des États Unis. Je sais "c'est lamentable" comme dirait Pierre Arditi chez Ardisson.?